Se marchan tres departamentos. Una vez más, llegan a Salamanca, aquí los ponemos a punto, los llevamos hasta su mejor momento a costa de sudor y lágrimas propios, y... los dejamos escapar. ¡Que sí, que es muy bonito que nos feliciten por el trabajo realizado, pero es más bonito aún que te valoren por ese trabajo no manteniéndote de ETT o mejorando tus condiciones laborales! Además, como siempre, las felicitaciones llegan tarde, cuando nuestros máximos responsables han sido incapaces de mantener un servicio valor. Dirán que es decisión empresarial del cliente, pero día a día vemos como los servicios de cierta importancia estratégica van desapareciendo de nuestra plataforma, o perdiendo llamadas en pro de otras subcontratas.
También es cierto que el perfil de quienes están arriba está más encaminado a departamentos menos “tranquilos”, en los que quizá la presión se debe más a la mala planificación de volumen de agentes frente a llamadas, que a los datos puros y duros. Queremos decir que a quienes les gusta gritar, presionar y agobiar al personal, disfrutan más de su día a día en un departamento de ventas que en uno de Reclamaciones Oficiales o un Servicio Técnico, por poner un par de ejemplos. Quizá por eso vamos viendo un viraje hacia esa tipología de departamentos. Quizá por eso los departamentos valor no se merecen el esfuerzo de partirse la cara. O quizá es que el volumen de dinero incentivado que por “h” o por “b” se queda por el camino es inferior. ¿Quién sabe?
58 trabajadores están ahora a la expectativa de saber qué pasa con ellos y otros tantos trabajadores de ETT están con los dedos cruzados por no ser los afortunados a los que no renueven para reubicar a estos 58. Así se motiva. Así se incentiva...
Así se negocia. Ellos sí que saben....Esto es Arvatraz...